lunes, 26 de noviembre de 2012

Capitulo 59


Hola!! Como andan?? En este dia feriado les traigo un capitulo se podria decir tierno despues de los anteriores! Espero que les guste y comenten



Todo puede cambiar...

En el capitulo anterior...

Me entristecí, él me tomó de forma suave el mentón y lo elevó para cruzar sus ojos con los míos.

-Nadie te va a hacer elegir, tienes mi palabra de honor, por mucho que estas palabras hayan perdido el auténtico significado que tenían en mis tiempos, cuando yo vivía.

-Me gusta cuando hablas así.

A pesar del dolor que invadía su rostro, torció la boca en una sonrisa que habría arrebatado el aliento a medio planeta.

Seguí esperando y Peter no regresó. A última hora de la tarde del tercer día, cuando ya había comenzado a resignarme y perdido toda esperanza, sonó la argolla de la puerta.

CAPITULO 59


Oí que alguien abría los cerrojos y un breve y desganado saludo por parte de Pablo.

-Lali -me llamó desde la entrada sin alzar la voz-. Veni un momento, por favor.

Pablo sostenía la puerta con pesar y allí, por fin, estaba él, con las manos metidas en los bolsillos y el rostro contraído en una extraña expresión que no pude descifrar. Me dirigí hacia él obligándome a mantenerme firme, a no mostrar las ganas que sentía de abrazarle.

-Gracias, Pablo -le agradeció con una leve inclinación de cabeza.

-Un placer -respondió de manera monótona.

Me despedí de él y Peter puso una mano en mi espalda al tiempo que me dirigía hacia su coche, pero en vez de detenerse lo pasó de largo, de forma que paseamos por la calle a pesar del calor asfixiante. 

Entramos un poco en el bosque, lo suficiente para quedar ocultos del resto de la gente, y cuando digo “gente” me refiero exactamente a los Esposito. Estaba segura de que no estarían mirando por la ventana ni nada por el estilo, pero respetaba la decisión de Peter de alejarnos lo suficiente para que sus oídos no pudieran captar nuestras palabras.

Ninguno de los dos hablaba. Mi euforia por su llegada estaba disminuyendo cada vez más al ver su actitud. La última vez que habíamos estado a solas había partido mi inerte corazón en mil pedacitos y la herida aún sangraba, más ahora con su cercanía. Su aroma volvió a invadirme, como hacía siglos que no ocurría y mi respiración se aceleró.

-¿Cómo te encuentras? -me preguntó al fin.

-Creí que no querías volver a verme -le encaré.

Me arrepentí de haber pronunciado esas palabras, porque en realidad solo quería lanzarme a sus brazos y agradecerle una y mil veces que hubiera regresado, pero en esos últimos días parecía que obedecía más al lado racional que al emocional.

-No, Lali, dije que quería que me conocieras, creí que era necesario.

-Lo que yo creo es que eso no tiene nada que ver. Nunca antes te ha preocupado ese asunto.

-Hay cosas que han cambiado.

-Sí, es verdad -afirmé intentando sostenerle la mirada, pero no fui capaz-. Me quedó muy claro qué es lo que piensas.

-Lali...

-Peter, he pensado mucho sobre eso y si es lo que quieres, lo acepto, no te molestaré más, no tienes ninguna obligación conmigo.

Él estaba ahí, esperando para hablar, quizá para intentar darme una explicación de lo que ocurrió ese día o tal vez para terminar de zanjarlo todo, y yo me estaba comportando como una estúpida. De pronto, me asusté. Tenía miedo, temía que me hiciera daño, y no me refería a que pudiera matarme, sino a mis sentimientos.

-Si lo que querías era que me adaptara, lo has conseguido -comencé de nuevo, concentrada en contemplar mis manos, retorciéndose sobre mi regazo-. Es posible que la culpa sea solo mía; nunca debí haber dejado que mis emociones corrieran por libre, creo que en ese aspecto sigo siendo... ¿cómo me llamaste? Ah, sí, humana, una humana tonta y estúpida que...

Un golpe de ira brotó en mi pecho al recordar todo lo que me había dicho aquella noche, todas las frases que me habían causado dolor y que, en el fondo, sabía que no merecía.

Pero cuando fui a acabar la frase, cuando estaba a punto de decirle cuánto detestaba ser tan frágil con él, me puso un dedo en los labios, sellándolos. Levanté con miedo la vista para enfrentarme a la fuerza de sus poderosos ojos.

-Déjame hablar, Lali. -Su voz era firme y sonó como si tuviera prisa por terminar cuanto antes, y eso me molestó. Me crucé de brazos, guarde silencio y esperé-. No creas que no he pensado en nuestra última conversación. -Parecía de pronto irritado y cortante, e imaginé que en el fondo mis palabras le habían contrariado-. Cuando Rocio me llamó, no puedes ni imaginar cómo me sentí al pensar que te podría haber ocurrido algo malo. Aunque no lo creas, significas para mí más de lo que parece, mucho más de lo que yo mismo imaginaba.

-Entonces, no intentes apartarme de ti.

-¿Por qué no quieres entenderlo? -preguntó exasperado.

Desvié la mirada, temiendo que volviera a decir que la decisión de la última vez era la más apropiada.

-Sé lo que eres -le recordé- y lo que haces. Quizá, más adelante, llegue el momento en que deba conocer los detalles, pero no ahora. Además, ¿por qué te preocupa tanto lo que piense de ti?

-Quiero ser justo contigo, Lali.

-¿Justo? -repetí con voz dolida mientras me acercaba hasta sentir su aliento sobre mi cara. Por fin podía volver a percibir su maravilloso aroma-. ¿Justo? ¿Tú me hablas de justicia? ¿Y no tendría que ser yo quien decidiese qué es justo para mí? ¡No tienes que serlo conmigo, Peter; tal y como dijiste, tú eres un gran predador y yo solo...!

-Lali...

-¿No es así? -insistí.

-Lo es -soltó.

Retrocedí un paso; él seguía creyendo lo mismo, todo era inútil.

-Entonces, dime por qué -musité en un hilo de voz.

-Me niego a creer que no te hayas dado cuenta. -Se detuvo y me miró fijamente a los ojos-. ¿Acaso tengo que explicártelo?

Negué con la cabeza.

-No -lamenté al percibir que se estaba comportando igual que la última vez-. No sé a qué has venido, pero yo me vuelvo a casa.

Me di la vuelta para enfilar el camino de regreso.

-Lali, escucha mi corazón.

-¿Qué?

-¿A qué velocidad late? -susurró con el rostro a un palmo de distancia del mío.

-Rápido -contesté, y escuché cómo su respiración se aceleraba aún más.

-¿Siempre lo hace así? -preguntó.

-A... a veces -tartamudeé-. ¿A qué viene esto?

-¿Cuándo? -insistió.

-No lo sé -reconocí-, no puedo recordarlo.

-Sabes que el corazón de un gran predador late más despacio que el de un humano. Ahora vuelve a escuchar -dijo-. Si doy un paso hacia ti -observó acercándose de nuevo, captando una vez más mi mirada con sus ojos-, ¿qué es lo que ocurre?

Muy a mi pesar, cerré los párpados y me concentré en sus latidos, pero no me atreví a volver a abrirlos.

-Late más fuerte y -mi voz se desvanecía- más rápido.

Tomó mi mano con gran delicadeza y la posó en su pecho.

-¿Y ahora?

No sabría decir qué iba más rápido, si mi respiración, la suya o su corazón. Un profundo dolor se apoderó de mí. Apreté los labios con fuerza para detener el temblor en el que habían comenzado a sumirse. Vacilé al alzar la vista por miedo a lo que podría encontrar, a enfrentarme a la realidad, pero, por encima de todas las cosas, a que se tratase tan solo de un sueño. En un esfuerzo sobrehumano, lo hice. 

-Te fuiste..., dijiste que... -No era capaz de terminar ninguna frase.

Se me hizo un nudo en el estómago, había demasiadas emociones en mi interior, no entendía ni qué trataba de explicarme.

-Fueron muchas cosas sin sentido porque nada de esto lo tiene para mí -admitió despacio, se notaba que le costaba pronunciar todas aquellas palabras-. Me fui por la misma razón por la que he regresado.

-No te entiendo...

-Hay algo que no te he contado -confesó- En una ocasión te comenté que cada uno de nuestros latidos es doloroso. Pues bien, mi corazón palpita desenfrenado cuando me acerco a ti, cuando intento tocarte..., es un tormento que creí que no podría resistir. -Tomó aire, como si más bien estuviera cogiendo fuerzas para enfrentar sus propias palabras-. Me fui porque por un momento temí cumplir con mi parte del trato.

-Yo... ¿te hago daño?

-Lo importante, Lali, es que estos últimos días he experimentado un nuevo dolor muy distinto. Algo grande e inexplicable, ni siquiera podría decir que se trate de algo físico, pero ahora tengo muy claro cuál de ellos no puedo soportar.

-Peter...

-No sé qué es porque nunca he sentido algo así. Solo sé que cierro los ojos y te veo a ti, que tengo tu aroma incrustado en mi mente, que mi ira se desata cada vez que se cruza otro gran predador por mi camino porque pienso que puede dañarte. Temo mirarme en el espejo porque me odio ante la posibilidad de que pueda corromperte. Sé que te hice daño, Lali, y toda una eternidad no será bastante para compensártelo, pero soy una criatura egoísta que solo mira por su propio bienestar, por eso estoy ante ti, de nuevo, pidiendo que no me apartes de tu lado. Quiero protegerte de todo, aunque no pueda defenderte de lo que soy.

Contuve la respiración, demasiado conmocionada para decir una sola palabra, incluso toda la mezcla de sentimientos se detuvo un instante; ahora sí que estaba perdida, ya no sabía ni qué pensar. Aquellas palabras que había estado esperando durante tanto tiempo se me estaban haciendo increíblemente extrañas y dulces a la vez. ¿Existía un mundo en el que Peter Lanzani me quisiera a su lado? ¿A mí? Mi corazón se encogió con un dolor diferente, a pesar de todo lo que había pasado, de cómo me había tratado, seguía sintiendo que lo quería y que, en el fondo, una parte de mí siempre lo haría.

-¿No dices nada?

-No puedo -reconocí.

-Entendería que no compartieras mis sentimientos, en especial después de mi comportamiento. No suelo arrastrarme de esta manera, así que, si vas a rechazarme, hazlo ya. -Era la primera vez que su máscara caía y podía ver en su interior, la primera vez que le veía dudar, tan vulnerable como yo. Entonces
sonreí-. ¿Hay algo divertido en todo esto? -me preguntó, ligeramente a la defensiva.

-No -dije a través del nudo de mi garganta-, sonrío porque no puedo llorar.

Se puso tenso, girando la cabeza hacia un lado.

-¿Tan terrible te parece la idea?

-No me protejas -respondí-. ¿Acaso no te has dado cuenta de que solo te quiero a ti? No vuelvas a escoger por mí, deja que de eso me ocupe yo.

Me miró inmóvil durante un instante y, de pronto, acortó la distancia que nos separaba y me estrechó entre sus brazos. Sentir su cuerpo tan cerca del mío, su aroma, el latido de su corazón, todo era perfecto ahora. Le rodeé yo también con mis brazos, había necesitado tanto ese abrazo... Noté sus labios suaves y delicados sobre mi coronilla.

-No volveré a hacerte daño, te lo juro.

-Lo sé.


CONTINUARA...

+10 FIRMAS SUBO OTRO

24 comentarios:

  1. Masssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss :DD

    ResponderEliminar
  2. Es un tierno en el fondo!!! Me morí muerta!!! Más!

    ResponderEliminar
  3. hola... hace poco encontre tu nove.. y recien hoy me puse al dia aprovechando el fin de semana largo...!!! te digo q me encantaaa!!!! es genial la nove tiene de todo un poco adrenalina intriga amor dolor..!!! de tododdd!!!! me encanta!!!!
    Espero q subas mas!!!
    Besos q estes bien!!!

    ResponderEliminar
  4. Es impresionantemente tierno... fuera de lo comun este capitulo y hermoso!

    ResponderEliminar
  5. Ahora empieza lo laliter :)

    ResponderEliminar
  6. holaaaa!! yo soy nuevaa recien empece a leer tu nove y me encantoo enserio esta muy buenaa!! cuando subas caps me avisas?? mi tw es @vale311095 y subi rapido dalee me gusto muchooo

    ResponderEliminar
  7. massssss no nos puedes dejar asiii

    ResponderEliminar
  8. Aaaaaaaaaaaaaaay!! Es un tierno en el fondo kjshkfgdsjkgfkasd ♥ Ame el cap!!
    Maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas♥

    @Camhii_Infante

    ResponderEliminar
  9. Brasil pide másssssssssssssssssssssssssssss

    ResponderEliminar
  10. Maaaaaaas porfaaaaa es re distinta esta nove a todas las qur ha leido!!es buenisima!!cuando la terminas podras decirnos el nombre del libro?gracias!!

    ResponderEliminar
  11. http://casijuegosca.blogspot.com.ar/ pasate!! novela yo leere la tuya desde el principio :)

    ResponderEliminar
  12. Hola, que tal? Me gustaria que pases a leer mi novela www.tusnovelalitter.blogspot.com ¿Recomendas mi novela? Si lo haces avisame y te recomiendo en mi blog, Besos

    ResponderEliminar
  13. POR QUE NO SUBISTE MÁS? TE OLVIDASTE DE NOSOTRAS?

    ResponderEliminar
  14. Porfavor, sube más!! Quiero ver que sigue, me leí toda esta nove en un día para nada'? No. Quiero ver como sigue y no encuentro los siguientes caps.

    ResponderEliminar
  15. holaaaa soy nueva lectoraaa!!! seguila por favor!!!!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar